Mientras espera una definición, Djokovic está bien y tiene "ganas de hablar" sobre su detención en Australia
07 de enero de 2022
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Así lo expresó la PTPA, la asociación de tenistas profesionales fundada por el serbio para jaquear la conducción de la ATP. El número 1 permanece en el hotel de aislamiento de Melbourne.
Mientras espera la segunda audiencia judicial el próximo lunes que determinará si puede o no jugar el primer Grand Slam de la temporada, el número 1 del mundo Novak Djokovic permanece en buen estado en Australia y "con ganas de hablar", según la PTPA, la asociación de tenistas profesional que fundó el serbio para jaquear la conducción de la ATP.
A través de un comunicado de prensa, el gremio de tenistas llevó tranquilidad a los fanáticos de "Nole", que permanece en un hotel de aislamiento en la ciudad de Melbourne, reservado para refugiados que solicitan asilo al Gobierno de Australia. "Estamos en permanente contacto con él y nos ha dicho que está bien. También nos ha expresado su deseo de explicar con sus propias palabras cómo fue su detención", sostuvieron en la carta.
La PTPA también defendió la libertad de los profesionales de la raqueta de jugar "con o sin vacuna", mientras que se acordaron de la Navidad ortodoxa y felicitaron a todos los creyentes. El cierre fue con el deseo de "ver pronto de vuelta a Novak en una pista de tenis".
Djokovic sigue retenido en el hotel, mientras sus abogados trabajan para justificar la exención de vacunación que le pide el Gobierno de Australia para dejarlo ingresar al país y competir en el Abierto de tenis, primer Grand Slam de la temporada.
Según el propio jugador, a través de un posteo en redes sociales, la excepción había sido avalada, pero a partir de las críticas recibidas en redes sociales, el primer ministro australiano Scott Morrison aclaró que no iba a haber un trato diferencial con el número 1 del mundo.
El incidente se convirtió en un escándalo diplomático cuando el presidente serbio Aleksandar Vucic acusó a las autoridades australianas de “maltrato” al número 1 del tenis y de ejercer una “caza política”.
En el medio también está el interés de los organizadores del torneo, entre ellos el municipio de Victoria, por tener a Djokovic, quien en el Abierto de Australia va en búsqueda de su décimo título, que sería su cuarto consecutivo y le permitiría convertirse en el máximo ganador de Grand Slam de la historia, superando al español Rafael Nadal (su máxima amenaza) y al suizo Roger Federer (no estará en Australia por lesión), con los que está igualado en 20.